Para cruzar el río
No necesito saber de triángulos isósceles
Ni construir una puerta
Ni zurcir cuatro paños
Carlo Magno y su vida no me estarían al alcance, lo mismo con José Miguel Carrera
Para movilizarme en pos de la búsqueda
Componer sinfonías no me ayuda
Ni tener la facultad de saber con qué fertilizar lo infecundo
Ni tampoco me es útil croquear la bahía costera
Calcular logaritmos me entorpecería
Para dar saltos y llegar lejos
Filosofar está de sobra
Adam Smith y la economía en estos casos: guácala
Transcribir poemas al francés me aburre
Y maquillar a la novia nunca es fácil
Para desinhibirme y actuar con total gracia
Memorizar corografías de Don Patricio Bunster sólo me tranquilizaría
Diagramar me encuadraría el alma
Aprender el inciso 2 del artículo 344 sólo me traería mala suerte
Actuar sólo espantaría
Ni Ernesto “che” Guevara, ni John Michael Stipe, ni el imponer la moda de vestir con colores neones y fuertes, ni barnizar su puerta, ni la constitución moralista, ni la religión, ni el saber de hiatos y diptongos me enfortalecerían el coraje.
Para atreverme y acercarme
Sólo necesito de las ganas.
No necesito saber de triángulos isósceles
Ni construir una puerta
Ni zurcir cuatro paños
Carlo Magno y su vida no me estarían al alcance, lo mismo con José Miguel Carrera
Para movilizarme en pos de la búsqueda
Componer sinfonías no me ayuda
Ni tener la facultad de saber con qué fertilizar lo infecundo
Ni tampoco me es útil croquear la bahía costera
Calcular logaritmos me entorpecería
Para dar saltos y llegar lejos
Filosofar está de sobra
Adam Smith y la economía en estos casos: guácala
Transcribir poemas al francés me aburre
Y maquillar a la novia nunca es fácil
Para desinhibirme y actuar con total gracia
Memorizar corografías de Don Patricio Bunster sólo me tranquilizaría
Diagramar me encuadraría el alma
Aprender el inciso 2 del artículo 344 sólo me traería mala suerte
Actuar sólo espantaría
Ni Ernesto “che” Guevara, ni John Michael Stipe, ni el imponer la moda de vestir con colores neones y fuertes, ni barnizar su puerta, ni la constitución moralista, ni la religión, ni el saber de hiatos y diptongos me enfortalecerían el coraje.
Para atreverme y acercarme
Sólo necesito de las ganas.
4 Comments:
jose miguel carrera, constitucion moralista, don patricio bunster temas tocados aquella noche el resto son muy cercanos tb
mi fiel seguidora emperatriz. esta usted en lo correcto. citando al caballero segismundo freud la creación onírica se vale de recursos imaginativos utilizados durante la última vigilia-día. siempre ha sido así.
besitos par usted.
ah!! la velada de ayer estuvo magnífica. sobre todo la presencia de alejandría dibarrat.
la forma mas simple de cruzar de un punto a otro es una recta, pero la mas interesante es a trvez de una sonrisa. leo
buenísimo , ese sentimiento lo han compartido muchos durante la historia, yo entre ellos.
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